¿Realidad?

Caminando por Providencia hacia arriba el sentimiento de la mirada de la gente le hace sentir cada vez más como un pequeño burgués, caminando con su camisa, corbata y vestón, paseando como si no tuviera más preocupaciones en la vida, sin embargo la realidad no se hace ajena a sus ojos ni mucho menos se escapa a su percepción, que aun que limitada, es capaz de cuestionarse incluso a sí misma.

Éste cambio surrealista dura en tanto las circunstancias se lo permiten, le permiten abstraerse en un mundo de lo que llaman cultura y calidad de vida, que a pesar de él se siente atraído a ese extraño mundillo de locos y despreocupados que tiene sus preocupaciones quién sabe en qué, sin embargo no se debe olvidar el potencial de estos locos y extravagantes individuos. Una vez que él se sube a ese colapsado tronco de cuatro ruedas vuelve en sí y por cada metro que avanza ese tronco más va chocando con su realidad, y más se agudizan sus contradicciones internas, que está demás decir que nunca las puso en duda y sabía que mientras caminaba por un lugar que tenía una leve brisa a trompetas de oro fascista iba pensando en como hacer la transformación de esa realidad como si fuera un superhéroe.

Seguirá paseando como ese mundo extraño y pintado para hacernos sentir que tenemos un lugar hermoso al alcance de nuestra mano, pero sin embargo no es cosa de ir cuando lo queramos o cuando las ganas de visitarlo lleguen como llega una ola a la orilla del mar, porque la separación que se hace es evidente, pero engañosa, pues estando ahí tanto él como otros se sienten de una forma distinta.


 "Los hombres son siempre niños, aun cuando a veces asombren por su crueldad. Siempre necesitan educación, tutela y amor."
                                            Máximo Gorki